LA LIMPIEZA: LA BASE DE TODA RUTINA DE BELLEZA

La limpieza es probablemente el paso más importante de toda rutina de belleza. Es fundamental para mantener una piel sana en todo sentido.
Limpiarse la cara en la mañana y en la noche puede que sea tedioso algunas veces, pero solo toma unos minutos y al final hace una gran diferencia.
Aún cuando puede parecer muy básico y banal, la limpieza puede variar según el tipo de piel, el estilo de vida y la rutina general. Es por esto qué a veces puede resultar confuso o difícil de entender cómo limpiar correctamente tu piel.

¿POR QUÉ LA LIMPIEZA ES TAN IMPORTANTE?

¿Alguna vez te has preguntado qué tiene de malo dejar de lavarse la cara por uno o dos días? Si la respuesta es sí, considera esto: saltar la limpieza en una rutina de belleza puede obturar los poros, provocando acné; también puede causar rojeces, resequedad e irritación debido a la deshidratación; y por supuesto tu cara lucirá sucia, oleosa y envejecida.

Claro que esto no ocurrirá de la noche a la mañana, pero es cierto que la limpieza es la manera más efectiva de quitar el sucio excesivo, el sebo, el sudor, las células muertas, la contaminación y el maquillaje.

Disminuye la posibilidad de tener granitos, hidrata la piel, protege la cara de las bacterias y mucho más.

Hará que la piel luzca radiante y sana y ayuda a mantener los poros del tamaño adecuado.

Bien sea que tu rutina consista en usar uno o seis productos, un rostro limpio ayudará a que tus productos de belleza sean más eficientes.

¿CUÁL LIMPIADOR DEBERÍAS USAR?

CÓMO ESCOGER EL MEJOR LIMPIADOR FACIAL

Ahora qué sabes por qué necesitas mantener tu rostro limpio, debes escoger el producto adecuado para tu cara.
Esto depende de tu tipo de piel. No debes usar un limpiador que contenga mucho alcohol si tienes la piel seca. Escoge uno natural, básico y sin fragancia si tu piel es sensible. Usa uno con un PH bajo si tienes la piel grasa.
Pon atención también a la textura. Si es cremoso puedes usarlo sobre la piel seca, pero si tu piel es grasa es mejor optar por uno en gel o espuma.
No es lo mismo limpiar un lienzo en blanco que uno pintado. Con esto lo que queremos decir es que si usas mucho maquillaje, es preferible uno diferente que sea desmaquillante.

Cuando un limpiador dice “suave”, quiere decir que quitará la suciedad sin secar ni irritar tu piel.
En Sepai tenemos algunas opciones que ofrecerte. Está CLEANSE, un gel a base de aceite 100% natural que quita delicadamente todo tipo de maquillaje e impurezas de la piel. Puedes escogerlo si tu piel es de normal a seca. Por otra parte tenemos WASH, una emulsión delicada que hidrata y acelera la renovación celular, equilibrando la producción lipídica. Se recomienda su uso para todo tipo de pieles aunque más que nada para quien tiene la piel grasa o mixta.

¿CÓMO LIMPIARSE LA CARA?

Ahora que ya tienes tu limpiador y conoces su poder, es hora de usarlo.
Limpia tu piel en la mañana para quitar el aceite acumulado en la noche y preparar la piel para el día que se tiene por delante. En la noche, quita toda la contaminación y suciedad que piel haya podido acumular durante el día.
En algunos casos es posible usar un limpiador en la noche y en la mañana lavarse la cara solo con agua, este sería el caso si tienes la piel realmente muy seca, en este caso deberás usar un limpiador hidratante.
Para limpiar la piel de la cara, aplica el limpiador haciendo círculos con los dedos, de manera de que el producto penetre en la piel consiguiendo un mejor resultado.
Si sufres de acné, granitos o tienes la piel congestionada, espera unos minutos antes de aclarar el producto. Luego enjuaga con agua tibia, ni muy caliente ni fría, de manera que la piel no se irrite ni se cierren los poros.
Después de retirar todo el producto, sécate delicadamente la cara con una toalla limpia y suave.
¡Finalmente has terminado de aventurarte en el mundo de la limpieza! Ahora que tienes toda la información, ve y disfruta de una vida limpia con tu producto favorito.

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